Cada año, el 2 de abril nos invita a reflexionar, a ponerle voz y luz a una realidad que vive en muchos hogares: el autismo.
Pero este año, desde Blue-Mom, queremos ir un paso más allá. Soñamos con un mundo donde no haga falta explicar tanto, donde la empatía sea natural, donde las diferencias no generen miedo, sino respeto y admiración.

Soñamos también con tener un lugar físico, una oficina, un punto de encuentro. Un espacio donde las familias puedan sentirse acompañadas, comprendidas y contenidas. Donde cada pictograma, cada herramienta, cada palabra tenga un propósito: el de acompañar desde el amor.

Este 2 de abril queremos recordarte que no estás sola, que tu hijo es un regalo, que la sociedad puede cambiar, y que ese cambio empieza con pequeños gestos: un abrazo, una mirada sin juicio, una puerta que se abre.

Porque todos merecemos un lugar! Y en Blue-Mom, estamos construyendo ese lugar, paso a paso, con vos.