Hoy retomamos el espacio de charlas dónde compartimos historias de otras madres. En este caso Cynthia, mamá de Lorenzo.

Lorenzo fue diagnosticado con TDH a sus 6 años y tiene otro diagnóstico que es panhipopituitarismo (afección por la que la hipófisis deja de elaborar la mayoría de las hormonas).

“Siempre estamos en la diyuntiva de que no sabemos hasta dónde es por un dignóstico o por el otro”.

“Cuando Lorenzo era chiquito le hice varias consultas a la que era su pediatra en ese momento. Tuvo un desarrollo tardío en el habla y la parte motriz, pero sobre todo me llamaba la atención cuando él empezó a jugar que secuenciaba muchisimo, era muy estructurado en sus rutinas, o si lo sacabas de su eje cuando le cambiabamos el orden de lo que hacíamos en el dia a dia, era muy chiquito, quiás esto fue antes de los 2 años y la pediatra le quitó importancia a esto”.

“Cuando recibí el diagnóstico de Lorenzo yo tenia 28 años, tuve a lorenzo con 22”.

“Nosotros somos 4 en casa, papá, Lorenzo, Dante y yo. En nuestro caso el diagnóstico en realidad fue luz plena, porque notábamos un montón de dificultades que no eran propias ni del aprendizaje ni de su forma de ser, habian muchas cosas que eran incontrolables, que él no podía dejar de hacer, por ejemplo aleteo en las manos, movimientos repetitivos; comportamiento que nos dábamos cuenta que no eran normales y a su vez involuntarios”.

“El diagnóstico fue luz porque entonces yo dije :-ok, lo que yo veo es ási, no estoy loca.- y a nivel escolar nos sirvió mucho porque se necesita un diagnóstico para que le den determinado trato, entiendo esa parte igual porque teniendo un diagnóstico uno puede exigir atención desde otro lugar”.

“Tener el segundo diagnóstico fue mas fuerte y movilizador, porque fue por una malformación en el cerebro congénita: -imagináte que a mi se me dió vuelta el mundo.-. entonces lo del TDH fue hiper liviano para mi. Lo compartí con mi familia y mis amigas, que fueron mi red de apoyo”

“Como aprendizaje, tengo el recordatorio constante de que cada niño es un ser único y singular y hay que tratarlo como tal. Por mas que uno intenta criar de igual forma es imposible, porque todos somos diferentes, con diferentes necesidades. Hay que querer, criar y cuidar a cada uno en su singularidad y tener estos diagnosticos es un recordatorio de que no puedo usar el mismo métodos con mis dos hijos, porque uno tiene 2 dignósticos y el más pequeño no tiene y tampoco presenta alguna alerta”

“Para nosotros fue algo bueno el diagnóstico, hay que sacarle un poco lo negativo y ocultarlo. Si tienen dudas sigan insistiendo, si algun médico no les convence cambien!, nosotros cambiamos varias veces. Nosotros tenemos que estar conformes con los profesionales.”

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